Diosdado Cabello reaccionó a la decisión del TSJ sobre la designación de una nueva directiva para Primero Justicia, cuya tarjeta electoral difícilmente sea adherida a la opción del nuevo candidato opositor Edmundo González Urrutia.
El Vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) Diosdado Cabello, manifestó su posición ante la decisión del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) sobre la presidencia del Partido Primero Justicia, expresando que ahora Henrique Capriles y Julio Borges tienen «ahora jefe nuevo».
«Lo bueno es que Capriles, Borges y toda esa gente tiene jefe nuevo. Es el dueño de la tarjeta (electoral)», dijo en la acostumbrada rueda de prensa de los lunes del PSUV desde Caracas.
Cabello bromeó con el hecho de que José Brito, designado como presidente del partido, es del Tigre, estado Anzoátegui. Por lo tanto, ahora dará órdenes a los políticos opositores que por muchos años han sido señalados como parte de la burguesía caraqueña.
La historia de Primero Justicia en Venezuela
El Partido Primero Justicia se convirtió en unas de las toldas más importantes de la oposición venezolana desde los inicios del Gobierno de Hugo Chávez, incluso superando en popularidad a los históricos AD (Acción Democrática) y Copei (Partico socialcristiano).
Sus primeros líderes fueron el dos veces candidato presidencial Henrique Capriles Radonski, el exalcalde y exiliado político, Leopoldo López y el también exiliado, Julio Borges.
La Sala Constitucional del TSJ ordenó «el nombramiento de una junta directiva ad hoc para llevar adelante el proceso de reestructuración necesario de la organización con fines políticos ‘Movimiento Primero Justicia»‘.
Este partido se suma a Voluntad Popular, AD y Copei, cuyo control se otorga por vía judicial a directivas paralelas.
La decisión del TSJ autoriza a la junta ad hoc de Primero Justicia a «utilizar la tarjeta electoral» y los símbolos del partido. No sólo eso, ordena al Consejo Nacional Electoral (CNE) «abstenerse de aceptar cualquier postulación para procesos electorales que no sea acordada» con la nueva directiva.
